Parques industriales

Los polígonos industriales exigen medidas urgentes contra los atascos: "No pueden ser guetos"

Los problemas de movilidad y la falta de suelo llevan a los parques empresariales a pedir la implicación de las administraciones para expandirlos hacia el Valle del Guadalhorce. La falta de transporte público es otra de las carencias y reclaman conexiones con la parada del Cercanías

El presidente de la Asociación de Polígonos Industriales, Antonio López. | ÁLEX ZEA

El presidente de la Asociación de Polígonos Industriales, Antonio López. | ÁLEX ZEA / CRISTÓBAL G.MONTILLA. málaga

Cristóbal G. Montilla

Cristóbal G. Montilla

En la transitada rutina diaria de los polígonos industriales de Málaga existe una pesadilla que cada vez afecta más a las personas que trabajan en las 4.000 empresas instaladas allí, y a quienes simplemente acuden a hacer alguna gestión o una compra. En los accesos y salidas de estos parques empresariales se han generalizado atascos que tienen a los ciudadanos parados dentro de sus coches, mientras los minutos corren en el reloj. Y esta realidad ha llevado a quienes pueden amplificar las reivindicaciones de estos polígonos industriales a exigirle a las administraciones pública medidas urgentes que atenúen los problemas de movilidad: «No pueden ser guetos de los que se tarda en salir casi tanto como en llegar desde Málaga a Granada, muchos trabajadores hasta han dejado de ir a almorzar a sus casas porque no les da tiempo a volver», aseguró el presidente de la Asociación de Polígonos y Parques Industriales y Comerciales de Málaga y Provincia (APOMA), Antonio López.

En este sentido, López añadió que «si se tarda en ir a otra ciudad menos tiempo que en salir de un parque empresarial, eso tiene una serie de efectos colaterales» que repercuten en el funcionamiento de las propias empresas y en los hábitos de sus trabajadores: «A los parques empresariales van a trabajar unas 40.000 personas y eso supone prácticamente el 7% de la población de Málaga, en las horas puntas no se puede ni salir ni entrar y eso supone que todas las personas de estas 40.000 que tienen jornadas partidas no pueden ir a su casa a comer», insistió.

Asimismo, López echó en falta una mayor apuesta institucional a la hora de dotar de más oferta de transporte público las zonas en las que están los polígonos industriales y, especialmente, de conexiones desde la estación de Cercanías existente en el polígono del Guadalhorce: «Sólo tenemos esta parada y cuando la gente se baja del tren no tiene ninguna opción más para seguir dirigiéndose a este u otro polígono, al llegar a la estación no se encuentra ni bicicletas, ni patinetes, ni autobuses o lanzaderas que puedan llevarlo a otro lado».

Además, López le exigió a las administraciones «más previsión y menos burocracia» para acometer infraestructuras que considera necesarias. En este caso, una de las principales reivindicaciones es la conexión de los parques empresariales, sobre todo los de Guadalhorce, Santa Teresa y Santa Cruz, con la hiperronda. También se reclama el desdoblamiento pendiente en Ortega y Gasset o el embovedamiento para hacer el doble carril del arroyo de calle Rosamunda, que conecta los polígonos El Viso, San Luis y Alameda, en las inmediaciones del Hospital Clínico y el campus universitario: «La construcción de miles de viviendas en Ortega y Gasset o el Distrito Zeta y la llegada de Amazon están ahí, en tres o cuatro años habrá miles de personas más que no podrán salir de sus casas si no se actúa ya».

Imagen del polígono Guadalhorce. | L.O.

Imagen del polígono Guadalhorce. / L.O.

Expansión hacia el Guadalhorce

Los acuciantes problemas de movilidad y otra realidad que acecha como la de la falta de suelo en la capital malagueña también ha llevado a los parques empresariales a pedir la implicación de las administraciones públicas para empezar a expandir los polígonos hacia el Valle del Guadalhorce.

A este respecto, López recordó que están teniendo problemas «tanto las empresas malagueñas que quieren crecer como las empresas que son de fuera y quieren venir aquí, que son muchas y a veces no pueden venir porque no hay suelo». «Es un problema bastante grande y no sólo lo tiene Málaga capital, también se da en la zona de Marbella y, prácticamente, en toda la costa», agregó.

De vuelta a los problemas de movilidad, el presidente de APOMA se rebeló, igualmente, contra esa concepción «antigua» de que «los polígonos son como guetos apartados en los que es muy difícil entrar y salir». En este sentido, al estilo de los que ya existen en otros países, abogó por «hacer parques empresariales a lo largo de una autopista, en una vía de comunicación rápida a través de 20 o 30 kilómetros hacia el interior de la provincia de Málaga». Con esta idea y la certeza de que «el término de Málaga capital no da para más», entronca la propuesta de crecer en el área metropolitana, hacia el Valle del Guadalhorce desde la autovía que va hacia Campanillas en las inmediaciones del Parque Tecnológico, «que sería un parque más».

Así, Antonio López explicó que «haría falta que los diferentes municipios -Cártama, Málaga, Coín y todo lo que es el Valle del Guadalhorce- hagan un plan a largo plazo y se pongan de acuerdo todas las administraciones, tanto las municipales como la regional y la estatal, porque es un bien común sobre el que no habría controversia entre administraciones». «APOMA quiere ser punta de lanza pero no encontramos la lanza», dijo como toque de atención a las instituciones.

La alargada sombra de la inundabilidad

A pesar de los avances ya realizados para disminuir el riesgo de inundaciones en los parques empresariales de la capital malagueña, este problema histórico sigue apareciendo de un modo u otro entre las reivindicaciones de los empresarios. Sin ir más lejos, la alargada sombra de la inundabilidad se asoma a las reflexiones del presidente de la Asociación de Polígonos Industriales de Málaga (APOMA), Antonio López, cuando enumera las cuestiones que son mejorables: «La inundabilidad es un tema que todavía no está completamente solucionado, a pesar de que se han hecho una serie de obras y que en esta cuestión sí que parece que todas las administraciones están poniendo de su parte», apuntó antes de poner ejemplos concretos.

En este punto, tomó como referencia las obras de defensa del Guadalhorce realizadas por la Junta de Andalucía para poner fin a las inundaciones y, a la vez que agradecía la actuación, esbozó los inconvenientes que implica que «aún no se haya plasmado en los mapas». «Eso significa que, a pesar de que la obra está hecha y de que se habrá mejorado mucho la inundabilidad, nadie sabe cuánto se ha mejorado y la burocracia sigue siendo exactamente la misma: cuando vas a contratar un seguro, el seguro te dice que está en zonas inundables; es muy urgente que salgan los mapas con esa obra y reflejen una inundabilidad mucho menor porque las 4.000 empresas que hay en los parques pueden estar pagando una sobreprima por estar en terrenos inundables sin realmente estarlo», enfatizó López.

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